Cuántas lluvias tomaría salir de la emergencia hídrica

Desde mediados de 2019 se registran balances hídricos negativos. ¿A qué se debe la falta de lluvias?

Juan Jose Neif, investigador del Conicet, en diálogo con radio Trend Topic para hablar sobre los orígenes y las consecuencias de la bajante del río Paraná. “En 1944 tuvimos una bajante pero no fue tan importante como esta, porque duró menos tiempo: duró 315 días; esta lleva 742”, advirtió.

Informó que “las bajantes de los ríos se valoran en función de dos indicadores. Uno es el nivel mínimo que alcanza el río, que en esta época está cerca de 0 en todos los puertos. El otro es la duración, que se percibe más y genera mayores impactos en la sociedad. Hay que aclarar que cuando decimos nivel 0 no es que el río está seco, sino que se mide con reglas escalonadadas que se colocan en las orillas. Todos los días Prefectura Naval mide la altura alcanzada por el río; cuando decimos 0 es el nivel mínimo que se puede alcanzar. A partir de ahí, tiene niveles negativos”.

“Esto se debe a la falta de lluvias: en toda la Cuenca del Plata llueve menos desde mediados de 2019; con balances de -400 o -500 milímetros”, agregó. El balance hídrico es la relación entre lluvia y evapotranspiración. “En muchas provincias tenemos deficiencias de 400 milímetros. En el caso de Corrientes, es prácticamente la tercera parte respecto del valor normal que tiene en una serie histórica”, indicó el investigador.

Si llueve menos, tenemos menos agua en el río y por eso las bajantes. Ahora, ¿por qué llueve menos?

“Tenemos la tendencia a creer que el río está en bajante porque llueve menos en el lugar donde vivimos y no es así. Llueve menos en toda la Cuenca porque hay menos radiación solar. Entonces se calienta menos el agua del mar en los primeros 100 metros y eso determina menor evaporación que, a su vez, determina que los vientos del trópico (que traen la humedad) estén menos cargados. Es decir, todo comienza con el balance en la radiación solar”, explicó Juan José Neif.

Por otra parte, remarcó que el problema no es solamente cuánto debería llover, sino cuánto tiempo. “El agua que fluye es el resultado de un tiempo previo en el que ha estado lloviendo y estamos casi un tercio por debajo de las lluvias normales. Para que los suelos de la Cuenca con deficiencia estén en condiciones debiéramos tener, por lo menos, dos o tres meses de lluvias continuas“.

“Además, el sol tiene períodos de más y menos energía, de 11 años de duración que van alternándose. Se debe al fenómeno conocido como ‘manchas solares’. Son zonas de menor radiación en el sol y cuando quedan frente a nuestro planeta, hay menor calentamiento del planeta, de los mares y, por su puesto, menos lluvia”, concluyó.