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Internacional

Ceuta: cómo entender el conflicto con los migrantes

Más de 8.000 inmigrantes irregulares, entre ellos 1.500 menores, llegaron entre el lunes y martes al enclave español de Ceuta desde Marruecos.


Este miércoles continuaron registrándose llegadas; aunque puntuales, en grupos muy reducidos y más distanciados. Esto se debió al aumento de la presencia policial en el lado marroquí, con los accesos hacia Ceuta cerrados y los “rechazos en frontera” al pisar suelo español.

De hecho, según informaron las autoridades españolas, 5.600 de los que entraron de forma irregular desde el lunes en la ciudad autónoma ya han sido devueltos.

Puntos clave para entender el conflicto:

1. Una cifra de migrantes sin precedentes

Las entradas comenzaron la madrugada del lunes, cuando miles de personas decidieron cruzar la frontera española de manera irregular en Ceuta; sin encontrar resistencia entre las fuerzas del orden de Marruecos en su lado de la frontera, denuncia la prensa española.

Las autoridades españolas desplegaron a soldados para tratar de contener la llegada de migrantes.

Para el martes más de 8.000 migrantes habían cruzado ya la frontera; rodeando los dos espigones fronterizos de las zonas de Tarajal y Benzú, hasta llegar a las playas ceutíes.

La mayoría eran hombres jóvenes, pero entre ellos había también niños e incluso familias enteras. Muchos utilizaban flotadores y botes de goma para intentar llegar a la orilla. Al menos un hombre falleció “en aguas marroquíes”, según fuentes policiales.

El evento más numeroso hasta la fecha se había producido el fin de semana del 7 y 8 de noviembre de 2020, en las islas Canarias; cuando en un solo día llegaron a sus costas 1.500 personas, desembarcando casi 2.200 migrantes en todo el fin de semana.

“El gobierno está poniendo todos los medios necesarios para proteger las fronteras y proceder a la devolución inmediata de las personas que están entrando ilegalmente en nuestro país”, declaró este martes el ministro del Interior español, Fernando Grande-Marlaska.

“Ceuta es tan España como Madrid o Barcelona. Vamos a ser contundentes en la defensa de nuestras fronteras. Igual de beligerantes vamos a ser en la defensa de nuestras fronteras como en luchar contra los discursos de odio”, dijo.

Muchos de los que están llegando a Ceuta son adolescentes.

2. Por qué se produce en Ceuta

Los territorios españoles de Ceuta y Melilla son, junto a otros puntos clave como las Islas Canarias, un foco tradicional de tensiones migratorias desde África. Se trata de dos ciudades españolas situadas en el norte de África y que colindan con Marruecos y son bordeadas por el mar Mediterráneo. Son el único punto de entrada terrestre a la UE desde este continente.

Ello convierte a estas ciudades en el objetivo de miles de migrantes cada año; muchos movidos por razones económicas y otros que huyen de conflictos armados o persecuciones que anhelan obtener el estatus de refugiado.

Su pasado lejano como territorios españoles se remonta al siglo XV. Ambas ciudades portuarias se desarrollaron como centros militares y comerciales que unían África con Europa; pero Marruecos siempre codició ambos enclaves y es una fuente de tensiones diplomáticas entre ambos países.

España les otorga el mismo estatus que las regiones semiautónomas de la península; por lo que desde 1995 gozan de un grado limitado de autogobierno como Comunidades Autónomas.

España ha desplegado militares alrededor del paso fronterizo de Ceuta.

3. Por qué ahora

El momento en que se produjo este movimiento masivo de migrantes levantó suspicacia entre analistas y medios de comunicación españoles; los cuales aseguraron el martes que las fuerzas de seguridad marroquíes propiciaron la situación debido a su inacción.

El pico de llegadas es “favorecido por una evidente relajación del control de los agentes alauíes”, apuntó eldiario.es. “La llegada se produjo sin que las autoridades marroquíes opusieran ninguna resistencia”, replicó el diario El País.

Las sospechas fueron alimentadas por la coincidencia con las nuevas tensiones diplomáticas entre Rabat y Madrid desde hace varias semanas. Y estas tensiones tienen un nombre propio: Brahim Ghali.

El 23 de abril, el líder del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Brahim Ghali, de 73 años, estaba hospitalizado en España “por razones estrictamente humanitarias”; según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores del país.

España acogió en un hospital al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, lo que alimenta las sospechas de que Marruecos esté dejando pasar a los migrantes como represalia contra el país.

Ghali, que fue ministro de Defensa saharaui y embajador del Polisario en España y Argelia, asumió el liderazgo en julio de 2016. Sucedió a Mohamed Abdelaziz, quien falleció por un cáncer tras 40 años en el cargo.

El anuncio de España se precipitó después de que los servicios de inteligencia marroquíes descubriesen que Ghali fue acogido con una identidad falsa en un hospital español; aquejado de Covid-19. La diplomacia marroquí rechazó esta situación y amenazó al gobierno español con represalias.

El momento del ingreso del líder del Frente Polisario era especialmente delicado. Se produce en un clima de recrudecimiento de las hostilidades entre su grupo y Marruecos; que en noviembre pasado rompieron el alto el fuego establecido por la disputa del territorio del Sáhara Occidental. Desde entonces se repitieron los incidentes armados entre ambos bandos.

España, que no reconoce diplomáticamente a la RASD, pero mantiene conversaciones con el Frente Polisario, rechaza la idea de que ambos eventos estén relacionados.

La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, afirmó en declaraciones a la prensa que las autoridades marroquíes le ha asegurado que la llegada masiva de inmigrantes irregulares a Ceuta “no es fruto del desencuentro” entre los dos países por la hospitalización del líder Polisario.

Originally tweeted by Las Mañanas de RNE (@LasMananas_rne) on 19 May, 2021.

4. Qué conflicto tienen Marruecos y el Frente Polisario en el Sahara Occidental

Cuando el 14 de noviembre de 2020 el propio Brahim Ghali declaró el estado de guerra a Marruecos, se ponía fin a tres décadas de alto el fuego entre el Frente Polisario y el reino de Mohamed VI; conflicto que permanecía en suspenso de mutuo acuerdo desde 1991.

La RASD emitió un comunicado en el que indicaba que después de 29 años a la espera de que se celebre un referéndum de autodeterminación, el pueblo saharaui había perdido su confianza en la capacidad de influencia de las Naciones Unidas para proveerlo.

Se reactivaba así la disputa por el Sahara Occidental, uno de los grandes conflictos olvidados.

Este territorio tiene casi 270.000 kilómetros cuadrados, principalmente de arena. Está escasamente poblado y es objeto de una disputa territorial que se remonta a la década de los 70 del siglo pasado.

Tradicionalmente poblado por tribus bereberes, el Sahara Occidental fue colonizado por España en 1884. Luego de 50 años, en 1934, fue convertida en una provincia española, denominada Sahara español; hasta que la ONU pidió la descolonización del territorio en 1965.

Para entonces ya pesaban sobre el Sahara Occidental las demandas del reino de Marruecos; que se había independizado en 1959, pero llevaba siglos reclamando el territorio como suyo. También se inició en el propio Sahara Occidental un movimiento independentista, con la creación, en 1973, del Frente Polisario.

En 1974, España anuncia sus planes para conceder mayor autonomía a los saharauis y propone organizar un referendo de independencia un año después.

Sin embargo, España se retiró en 1975 sin haber llevado a cabo dicho referendo. Por cual, Marruecos se anexó el Sahara Occidental y alentó a miles de marroquíes a establecerse allí.

En noviembre de 1975, 350.000 marroquíes cruzaron la frontera en la llamada Marcha Verde para presionar por la reivindicación del reino. Por su parte, el Frente Polisario proclamó en febrero de 1976 la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y durante 16 años mantuvo choques armados con Marruecos por la soberanía de la zona.

Hasta 1991, cuando se llegó a una tregua negociada con la ONU con la promesa de un referendo.

La relativa calma se mantuvo hasta noviembre de 2020, cuando se presentó una incursión de tropas marroquíes en el paso fronterizo de Guerguerat; una zona desmilitarizada que separa Mauritania de las zonas controladas por Marruecos.

El conflicto en Sahara Occidental lleva décadas sin resolverse.

Entonces, el Frente Polisario consideró que se había roto el acuerdo de alto el fuego suscrito.

En la frontera de Marruecos con la vecina Argelia se hallan entre 100.000 y 200.000 refugiados saharauis que viven en condiciones precarias; en campamentos alrededor de la ciudad desértica argelina de Tinduf.

Naciones Unidas considera el Sahara Occidental como un territorio no autogobernado, pero reconoce su derecho a llevar a cabo un referendo de autodeterminación.

Fuente: BBC.

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