Alberto Fernández agradeció las muestras de afecto y preocupación

En medio de un tenso día, que comenzó con una bomba molotov y continúa todavía con la protesta policial frente a la Quinta de Olivos, el presidente agradeció las muestras de afecto y preocupación. Alberto Fernández recordó que “estamos en pandemia”, por lo que pidió “no potenciar el riesgo” de contagios de Covid-19.

A través de su cuenta de Twitter, Fernández agradeció “todas las muestras de preocupación y afecto” recibidas, al tiempo que señaló: “Los problemas debemos afrontarlos y resolverlos en paz y con sensatez”.

“A quienes quieren venir a acompañarme, los abrazo y les pido que no olviden que estamos en pandemia. No potenciemos el riesgo”, escribió.

Detenido por arrojar una bomba molotov en Olivos

Un hombre puso en alerta a la seguridad presidencial tras arrojar una bomba molotov en la Quinta de Olivos, la cual fue desactivada por efectivos de la División Explosivos de la Policía Federal.

Pasadas las 6 de este miércoles, el hombre arrojó el artefacto y minutos después fue detenido por la Policía en Antonio Malavert al 1.350, calle paralela al ingreso oficial.

No hay personas heridas ni instalaciones dañadas. La causa quedó a cargo de la jueza federal Sandra Arroyo Salgado. Investigan si el agresor tiene problemas psiquiátricos. Fue identificado como José María Álvarez, de 47 años.

“Se rompió la cadena de mando”

Esta frase resuena entre agentes de la Policía Bonaerense, que hacen sonar sus bombos en reclamo por una mejora salarial y mejores condiciones de trabajo en la puerta de la Quinta de Olivos, que está custodiada por la Policía Federal y Prefectura.

La tensión emerge del atípico reclamo que comenzó el lunes pasado con un pequeño grupo de policías en la Plaza Adrogué. Las imágenes de esa protesta se viralizaron en distintos grupos de Facebook y Whatsapp de los policías, lo que terminó en una de las mayores protestas policiales de la historia reciente.

Por estas horas, nadie puede acercarse a la Quinta presidencial salvo que tenga algún motivo. El miedo a que la situación suba de temperatura se desplegó en forma de operativo policial.

Mientras tanto, el grupo de bonaerenses se agrupa frente a uno de los ingresos, sobre la avenida Maipú. Allí formaron una hilera con unos 30 patrulleros del Comando de San Isidro y Vicente López y de las Policías Locales de esos distritos, encendieron sus sirenas para hacerse oír.

“Hasta que no haya una respuesta favorable a nuestra situación en La Matanza no nos vamos de acá”, manifestó un Teniente Primero del Comando de San Isidro parado frente a la residencia presidencial con su uniforme y su Bersa Thunder 9mm colgada al cinturón, una protesta de funcionarios públicos armados frente a donde vive el presidente.